Y es que, al igual que pasó cuando España ganó el Mundial de Sudáfrica en 2010, un acontecimiento de este tipo genera númerosos beneficios para el país: influye en el ánimo de los ciudadanos, activa el consumo, el turismo y la hostelería y además se publicita la marca ‘España’ a nivel mundial.

Sector textil:

La venta de banderas de España se dispara durante estos campeonatos. Según explica José Luis Sosa –director de la principal fábrica de banderas nacionales- durante esta Eurocopa han vendido unas 30.000 banderas, 25.000 más que un año normal, que suelen vender 5.000.

“En la Eurocopa de 2008 vendimos unas 50.000 banderas, en el Mundial de 2010, unas 40.000 y en esta Eurocopa llevamos unas 30.000”, explica un comerciante.

José Luis apunta que el número de banderas que vende ha ido disminuyendo desde el año 2008. Según él se debe a dos factores. «Se compran menos banderas porque la gente ya tiene de otros años y también por el auge de las copias chinas», explica.

Ádivin, otra de las empresas que fabrica banderas en España, ha triplicado sus costureras y ha establecido turnos de mañana, tarde y noche para atender la creciente demanda de estos artículos, por la que prevé vender 25.000 unidades en total repartidas en diversos tamaños.

La venta de las camisetas oficiales de la selección española también aumenta. “Desde que España empezó a ganar se nota mucho, es un no parar y cada vez se venden más camisetas personificadas con el nombre”, cuenta un dependiente de la sección de deportes de una gran superficie de Madrid.

Se nota que hacemos algo más de caja  en la hostelería:

Otros de los negocios que sale ganando es la hostelería, que en estos días hace su particular agosto. “Se nota que hacemos algo más de caja, pero también es verdad que con la crsis la gente ve más los partidos en casa y se toma allí la cervecita”, dice el dueño de un bar de la calle O’Donnell de Madrid.

Una hora antes del partido la terraza ya está llena:

Los bares situados en las zonas turísticas de la capital y los que tienen terraza salen ganando con los partidos. «El calor ayuda a que la gente salga a las terrazas y si encima les ponemos el fútbol, consumen más», dice el camarero de un bar de la zona norte de Madrid. “Nosotros ponemos una pantalla fuera y la terraza está llena una hora antes del partido”, comenta.

La venta de televisores se dispara para estos eventos:

Otro apunte, es que por estas fechas de grandes competiciones deportivas, sobretodo futbolisticas, anima a mucha gente, a que acaben decidiéndose a comprar esa televisión de plasma de grandes dimensiones, para poder disfrutar de las eliminatorias de la selección.

En resumen, una victoria, no solo cambia el ánimo general, sino que anima de alguna manera el consumo colectivo.